El Sol viajará por Piscis desde el 18 de febrero al 20 de marzo 2014. El Sol, la luz, ha entrado en el mar iluminando ante nuestros ojos un mundo misterioso, lleno de criaturas de colores y de formas extrañas. EL Sol, que simboliza nuestro ego, en Piscis se disuelve, para hacerse uno con el todo, para que podamos expandir las fronteras de la consciencia, para que podamos incluir en nuestro mándala todo lo que aparece en este ir y venir infinito de sensaciones que llamamos vida. Piscis es el último de los 12 signos, es la etapa final del ciclo donde soltamos, donde nos entregamos a la voluntad de algo mayor que nuestro pequeño yo. Piscis no rechaza, ni pone barreras, simplemente se funde como la gota se funde en el océano. Cuando nuestra sed, nuestros deseos se extinguen, se abre una dimensión de quietud, de paz. Por esto a veces se asocia Piscis con el sacrificio. Sacrificio es hacer sacro. No es tirar nuestra energía sin ton ni son. Es vivir desde el soltar en un mundo sagrado. Piscis anhela el paraíso perdido; en lugar de buscarlo en versiones artificiales que solo aumentan la adición y la evasión, podemos vivir el cielo en la tierra. Piscis es el signo del místico, de la compasión, de la espiritualidad; pero también, si la energía se vive de una forma poco elevada puede ser donde nos perdemos, donde nos ahogamos en nuestra propia confusión y falta de dirección; donde nos queremos fusionar con otra persona volviéndonos dependientes emocionalmente. Es el limbo donde podemos perder la consciencia, o por el contrario, es donde podemos regresar a nuestro ser, completamente conscientes para prepararnos para renacer a un nuevo ciclo cuando el Sol entra en Aries y la naturaleza explota con la fuerza brutal de la primavera. Ahora es el momento del “cansancio de primavera”, de ensoñar y escuchar nuestras voces internas, de prestar atención a lo que nos viene de otras dimensiones del ser, las voces de nuestros sueños, es el momento para buscar la visión para luego en Aries renacer a un nuevo yo, una octava más en nuestra evolución, purificado por las aguas del infinito mar.
Este mes nos es de gran ayuda practicar la meditación, la danza, el canto, el escribir, el escuchar con atención y compasión, el amar a los seres grandes y pequeños. Es importante descansar lo suficiente, beber mucha agua y escuchar nuestro corazón.
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