Venus en Capricornio desde el 10 de diciembre 2014 hasta el 3 de enero 2015.
La Diosa del Amor en el signo de la Cabra según muchos siente frío. Saturno, también conocido como el Señor del Karma, gobierna a Capricornio con su severa madurez, y aparentemente no tiene nada que ver con las suaves curvas de la hermosa Afrodita. Creo que, por empezar, no conocemos bien el arquetipo de esta poderosísima Diosa tan antigua como la misma humanidad. No es esa niña mona rodeada de querubines como algunos pintores la han retratada durante el medioevo, sino tiene sus raíces en Diosas babilónicas como Ishtar, Diosa del Amor y de la Guerra. En resumen, es muy poderosa, y en fuerza y poder no tiene nada que envidiar a los demás planetas. En Capricornio expresa su fortaleza más íntima, la más oculta, renuncia a su encantadora seducción y se sienta en lo alto de una montaña a reflexionar, en un retiro solitario, rodeada de buitres, animales salvajes y el aire fresco de las alturas…y ve…con claridad…lo que necesita, lo que quiere, lo que no quiere, como construir su vida, su amor, sus relaciones, sus finanzas y su futuro. Es la Venus constructora de su propia realidad, es la Venus que sabe que amar empieza por uno mismo. Sabe que para conectar con el amor profundo, con el amor inteligente, con el amor que sana, a veces hay que alejarse e irse a los desiertos de piedra, y aceptar que como compañero solo se tiene lo salvaje, la Cabra.El símbolo de Capricornio tiene cola de pez, porque en este retiro de soledad, Venus profundiza en sus sentimientos, lo acuático. Conecta con su realidad, con sus entrañas, y convierte su dolor en su fortaleza. Venus en Capricornio es esta fuerza constructora que habita en todos nosotros , que al ver como se han caído las ultimas ilusiones, las redes de maya, tejidos por los encantadores de serpientes internos y externos, estas partes nuestras que idealizan personas, relaciones y situaciones, decide que es hora de hacer una limpieza y ser práctico. Venus en este tránsito ve con exquisita claridad lo que hay y lo que ha habido. Ve como el último de sus rechonchos querubines se ha quedado tieso, secado, desangrado con su propia flecha. Venus en Capricornio, que tan mala prensa tiene en la astrología popular, es la puerta a un amor realista, a una recapacitación adulta, y lo más maravilloso es que nos puede ayudar a transformar nuestro dolor, nuestras desilusiones en nuestra fuerza para construir un futuro más digno. Venus en Capricornio ama, ama muchísimo, pero tiene la fuerza de Saturno, y la frase de Frida Kahlo podría ser suya. “Donde no puedas amar, no te demores.” Todos podemos unirnos a esta reflexión y apostar por un amor maduro y constructivo. Nunca es tarde para crear buenas causas para futuras cosechas, y para los esfuerzos que merecen la pena. Venus en Capricornio toma prestado la guadaña de Saturno para cortar los lazos que no nos permiten vivir un amor sano o, por el contrario, nos arma de valor para comprometernos de una vez para siempre.
Venus también gobierna las finanzas y el arte, es un buen momento para como se dice en mi país” Nägel mit Köpfen machen”, traducido “hacer clavos con cabeza”, que significa hacer algo de verdad. Comprometerse con escribir ese libro, invertir con sabiduría un dinero, comprar algo realmente útil, convertir un hobby en profesión y respetar nuestro trabajo y energía, pedir un sueldo digno por nuestros esfuerzos, en pocas palabras dar forma y realidad a nuestra creatividad, nuestras ambiciones y nuestros sueños.
Copyright© Margit Glassel.
13/12/2014
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