Ya está…mañana 15 de diciembre es exacta por sexta y penúltima vez la cuadratura entre los dos propulsores del cambio Urano en Aries (a 12º35) y Plutón en Capricornio (a 12º35)
Como en otras notas os he comentado, está cuadratura nos ha acompañado desde el 2009 subiendo la potencia de su fuerza como si de un tsunami energético se tratara, donde se mezcla el poder de los terremotos subterráneos, de los volcanes escupiendo lava (Plutón) y los rayos eléctricos de las armas de los guerreros del futuro y de los dioses de las tormentas del pasado (Urano en Aries). No estoy exagerando, pero no quiero que os asustéis. Es una simple imagen de una energía de alto voltaje que tenemos a nuestra disposición si queremos REALMENTE romper con obstáculos, adiciones, barreras, y con esos bloqueos kármicos que nos mantienen atrapados desde no sé hace cuántos siglos. Es poder en estado puro. No es un momento para derrocharlo tontamente en conflictos sin sentido, en preocupaciones mundanas o superficiales. Es como si tuviéramos delante un Ángel Terrible que nos ofrece ayuda con su llameante espada. ¿Nos queremos liberar o no? ¿Queremos dar este salto cuántico y destrozar lo que queda de nuestras cadenas? ¿O dudamos? Si dudamos mejor “no salir de casa”…y taparnos la cabeza con el edredón. Las Valkirias galoparán por los cielos de nuestro universo , despejando…despejando…
La mejor actitud: observar y cabalgar la energía. Si tenemos planetas cerca de 12/13 grados de Aries, Capricornio, Cáncer o Libra, nos afectará especialmente.
Os pongo las fechas de las veces que fue exacto la cuadratura y que son como momentos culminantes de este trabajo de evolución intensa. Os recuerdo que con los tránsitos no son los días en sí, sino más bien las olas energéticas que se generan alrededor de estos días, que tenemos que tener en cuenta. Si somos muy sensibles es posible que llevemos días antes de la cuadratura exacta sintiendo su poderío. A veces la catarsis ocurre unos días después. Lo que sí es seguro, que se abre el cielo para darnos un empujón.
La cuadratura que empezó a hacerse notar desde el 2009, digamos como cuando tiembla la tierra porque se acerca un gigante, pero no lo ves, pero notas que algo se está moviendo, algo importante. Fue exacta por primera vez el 24 de junio del 2012. Es como ver claramente el gigante y casi morirse del susto, entrar en casa y esconderse en el sótano. La segunda vez fue el 19 de septiembre del 2012, la tercera el 21 de mayo de 2013, la cuarta el 1 de noviembre de 2013, la quinta el 21 de abril de 2014, la sexta es mañana, el 15 de diciembre 2014 y la última que nos espera es el 17 de marzo de 2015. Después de esto su energía disminuye gradualmente hasta desaparecer completamente en 2018. Pero bueno, la intensidad y la oportunidad la tenemos ahora. Es decir, ya conocemos al gigante, nos hemos recuperado del susto, algunos quizás han establecido un dialogo con él, otros ya se han hecho amigos, y los más atrevidos lo han puesto a trabajar para que les ayuda a construir su castillo. En fin, os animo a que os preparáis para dar un salto, y si estáis muy eléctricos es porque es lo que toca. El año pasado tuve la experiencia de galopar bajo una tormenta eléctrica de verano y el gozo fue increíble. Fue peligroso, me podría haber fulminado un rayo, me empapé hasta los huesos, tuve agujetas, me constipé, pero esta experiencia se ha quedado conmigo para siempre y no me arrepiento, creo que fue la vez que más cerca estuve de las hijas de Odín.
El universo es bondadoso, el universo es poder, el universo nos quiere libres.
Copyright© Margit Glassel.
14/12/2014
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